Argentina eliminará el impuesto a la exportación del 8% sobre el crudo convencional.

2025/11/20 11:16
bombas

El gobierno nacional de Argentina anunció el 18 de noviembre que eliminará el impuesto del 8% a las exportaciones de petróleo convencional en un intento por estimular la producción y las exportaciones después de años de declive.

 

La primera provincia que se beneficiará de la eliminación de impuestos será Chubut, la mayor fuente de crudo convencional del país, según informó el Ministerio de Economía en un comunicado.

 

La exención se extenderá "gradualmente al resto de las provincias productoras", añadió.

 

El gobernador de Chubut, Ignacio Torres, ha sido el principal defensor de la eliminación del impuesto, afirmando en octubre que esto reactivaría la inversión para mantener la producción de crudo pesado proveniente de las reservas maduras en la provincia sureña y en todo el país. Añadió entonces que esto mejoraría la competitividad del petróleo convencional en los mercados de exportación, contribuyendo así a incrementar las exportaciones.

 

Como parte de la desgravación fiscal, los productores de petróleo, a través de la Cámara de Exploración y Producción de Hidrocarburos, una agrupación del sector, se comprometieron a realizar las inversiones necesarias para aumentar la producción y las exportaciones, según el comunicado.

 

Esta es la última eliminación de impuestos a las exportaciones tras la decisión del 17 de noviembre de suprimir el gravamen del 8% sobre las exportaciones de lubricantes, en un intento por estimular la inversión para aumentar la producción y las exportaciones.

 

En X, anteriormente conocida como Twitter, Torres calificó la medida como un "paso histórico" y agregó que "restablecerá la previsibilidad" en el sector petrolero, "un motor central de la economía de Chubut".

 

Torres afirmó que el ahorro para los productores será de 370 millones de dólares anuales, que se reinvertirán en la industria.

 

Reconstruir la producción

Chubut, que en su momento fue la mayor fuente de petróleo de Argentina, ha visto disminuir su producción a lo largo de los años debido al agotamiento de sus reservas. La producción petrolera en la provincia cayó un 4,4% en septiembre, hasta los 122.700 b/d, frente a los 128.900 b/d del mismo mes del año anterior, lo que amplía la caída al 23% desde los 160.000 b/d de hace una década, según datos de la Secretaría de Energía.

 

Como resultado, las exportaciones de Escalante, un crudo pesado producido en la provincia, cayeron un 24% a un promedio de 26.000 b/d en 2024 desde 34.300 b/d en 2021, aunque se recuperaron a 30.700 b/d en los primeros ocho meses de este año, según los datos.

 

Shifting to Vaca Muerta

La demanda de eliminar el impuesto a las exportaciones de crudo convencional surgió a medida que más empresas locales e internacionales centran su atención en Vaca Muerta, uno de los yacimientos de esquisto más importantes del mundo. Este yacimiento tiene un enorme potencial de crecimiento —solo el 10 % está en desarrollo— y menores costos. Desarrollar cada pozo en Vaca Muerta cuesta entre 5 y 10 millones de dólares, en comparación con los 20 a 50 millones de dólares que cuesta desarrollar pozos convencionales, según datos de Economía & Energía, una consultora local.

 

El resultado es que la formación, en el norte de la Patagonia, ha pasado de comenzar a producir en 2012-13 a producir más de 557.000 b/d en septiembre, o el 66% de la producción total de crudo del país de 842.000 b/d ese mes, según datos de la Secretaría de Energía.

 

Por otra parte, el petróleo convencional, gran parte del cual es pesado, se desplomó a 279.000 b/d en septiembre desde más de 840.000 b/d a finales de la década de 1990, según muestran los datos.

 

En un seminario web celebrado el 22 de octubre y organizado por el Instituto de Energía de la Universidad Austral, Emilio Nadra, director comercial de Compañía General de Combustibles, una de las principales productoras de petróleo convencional del sur de la Patagonia, afirmó que la eliminación del impuesto a la exportación podría aumentar la rentabilidad de las exportaciones de crudo pesado en 5 dólares por barril, lo que incentivaría nuevos desarrollos.